sábado, 7 de abril de 2012

La autopsia de Dios revela su irremediable soledad.

(del poemario inédito Los párpados de Dios)
azañA ortegA

3 comentarios:

мαyяoрolis dijo...

La soledad entra cuando uno lo decide... no tiene porqué ser tan mala.

¡Saludos!

MoiZés AZÄÑA dijo...

No es mala soledad, de hecho. Es, más bien, un lujo necesario.

Moisés Azaña Ortega

Anónimo dijo...

Exacto un lujo que sólo los valientes se pueden dar