martes, 10 de diciembre de 2013

Sobre la impuntualidad


Ella no fue la primera que quiso terminar conmigo
Recuerdo la vez que Vivian también lo quiso
y solo por llegar tarde
todas las veces que nos vimos

Y esa vez que quiso terminar
 le dije que no volvería a llegar tarde
que intentaría ya nunca más llegar tarde
y como ya supondrán a la
siguiente volví a llegar tarde
Vivian solo se rio
e hizo como si no quedaba de otra
había que seguir con este buen hombre
ella sabía que yo hacía lo imposible
por estar allí a la hora

Todo el mundo que me conoce sabe
que yo intento por todos los medios
no llegar minutos después de lo acordado
pero hay algo en mi mecanismo
algo que no logro dominar
que hace que siempre
inevitablemente
llegue después
siempre siempre
siempre
y eso ya cansa
a mí me cansa
me hace renegar   me da cólera
y no sé cómo hacer para llegar temprano
al menos una vez en mi vida

A veces pienso
que cuando me muera
si alguien pregunta que cómo era
le responderán que era
un tardón del demonio
que si algo podía definirme era mi puntualidad a deshora

Recuerdo que cuando conocí a Niña Blue
había escrito en mi cuadernito verde
—un cuaderno que ya no uso y que coleccioné miles
con el afán de algún día pasarlos al ordenador
pero que ahora están tirados y empolvados en algún rincón de mi cuarto
esperando el momento que nunca llega—
el asunto es que en uno de esos
tantos cuadernos escribí algo acerca
de la impuntualidad y Niña Blue
sin que yo me diese cuenta lo
leyó y me dijo que ella era igual
una impuntual del demonio

después
cuando estuvimos
ella se dio cuenta que lo mío
ya era el colmo
pero ese escrito me salvó
varias veces
Tú me conociste así
le decía
y ella
Pero yo nunca pensé que era tanto
pensé que tardabas cinco a quince minutos
y no media hora o dos horas como ahora

decía que lo mío ya excedía todo límite
pero ella sabía que no lo hacía
por malo que
de corazón intentaba cambiar
por mí y por el mundo
que me rodeaba

Pero no todo el mundo entiende
que mis deshoras no son planificadas
que hago todo el esfuerzo por llegar temprano
si de verdad comprendiesen que
es a mí a quien más le molesta
tal vez así todo el mundo me amaría un poco más
o no me odiaría tanto
tal vez así
quizá así
pero hoy nuevamente llegaré tarde en mi encuentro con mi Moka y
solo por escribir estos malditos renglones

Sé que todo este tiempo antes de que llegue
estará odiándome y yo llegaré
sin ninguna excusa y con
toda la tristeza y la rabia adentro
queriendo morir allí mismo y
sin saber qué decirle

MOISÉS AZAÑA ORTEGA