Relato vedado
AZAÑA ORTEGA, Moisés
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
LA PALABRA DESNUDA
Búscate, búscala, búscame.
Contribuyentes
Etiquetas
Archivo del blog
Cepillando la caries social
El sarro ebulliciona y salpica su pútrido germen a los estómagos mentales que cada día se vuelven menos conscientes, más indiferentes con lo que sucede en el derredor humano. Ante esto la palabra es un buen cepillo, solo hay que saberlo utilizar.
15 comentarios:
Creo que no es necesario intuir quien es la dama de tu relato, pero para conservar el misticismo que le diste, me reservo el razonamiento.
Causa fascinacion tu modo de amarla, de mirar hasta uno por uno los poros mismos de su cuerpo y quedarte en ella con los ojos como si contemplaras una obra de arte... Ella debe serlo, debe valerlo .
Un simple "GRANDE" no basta para describir lo que siento al leer tus cuentos. Transmites una realidad triste pero bonita a la vez...Gracias por escribir Moi.
MelO
jajaja... claro que no estoy resentido, loco, sólo estaba bromeando (acerca de las fotos de SM). De verdad, no lo escribi de mala leche.
por cierto, me pareció muy interesante ese relato. Yo siempre pienso que eres un buen escritor,sólo bromeaba cuando dije que tus poemas me daban ganas de vomitar.
Muchos abrazos.
Moises no se que decirte, siempre describes la realidad muy a tu manera y lo haces muy bien, me ganas escribiendo de hecho! tu cuentas mejores cronicas, sigue asi!
Edith
Otra vez sorprendiéndome. Aunque tuve que leer dos veces para una mejor comprensión, han sido exquisitas las imágenes que has mostrado.
Jorge Mendoza
Alucinante. No es necesario escribir alguna quimérica historia para ofrecer una literatura fenomenal. Lo estás demostrando.
Pero qué cabrón, no llegué a leer Frazada...
¿donde esta frazada?
...
al menos voy a salir felìz de este blog.
miren a hombre extraño. la frase armoniza con su imagen
jajaja
:)
Frazada está siendo lavada. Disculpen la molestia que ha ocasionado el disolverla momentáneamente.
Y la frazada señor Azaña?
jhonny
Retornó FRAZADA.
PD: Por obra y gracia de los «mandamientos» de aquellos que no pudieron leerlo, he vuelto a publicar —como diría una tía histérica que tiene un programa en la televisión:— con el afecto que tengo hacia ellos (no seas floro pe’ Moisés).
Soy el primer lector de la segunda edición del cuento (?)
Me gustó mucho, muchísimo. Es muy romántico y no es cursi.
Y otra vez desapareció?
De nuevo la sacaste. ¿Por qué?
Jorge Mendoza
¡De nuevo! :)
Publicar un comentario